Bombas de turbina flexibles sanitarias e industriales
Solucionan el trasiego de la más alta gama de productos alimentarios, farmacéuticos y químicos, con caudal de 2.000 hasta 50.000 litros/hora.
Sus aplicaciones en la versión sanitaria pueden ser: Leche, yogurt, glucosa, vino, mostos, miel, mermelada, zumos, alcohol, aceite, salmuera, agua destilada, champú…
Para la industrial: Ácidos, alcoholes, formol, vino, aceites alimentarios, agua destilada, vaselina, glicerina, fluidos asépticos, salmuera, aromas, fertilizantes, jabones, geles, detergentes, champúes, cremas, perfumes, gelatina, tintes, gasoil, fuel ligero, aceites minerales, grasas liquidas…
La Serie Sanitaria
Con cuerpos de las bombas están fabricados íntegramente en acero inoxidable 316 L. La turbina es fabricada en nitrilo sanitario, con certificado según las normas FDA del L.G.A.I. Technological Center. Las bombas sanitarias aportan una gran facilidad de limpieza, permitiendo su desmontaje en pocos segundos y sin necesidad de herramientas. Su estudiado diseño permite una total visualización de todas las partes en contacto con el producto, ya que no existen puntos ciegos donde puedan desarrollarse las bacterias.
La Serie Industrial
Las bombas que componen la serie Industrial tienen cuerpos fabricados íntegramente en acero inoxidable 316 L o en latón, siendo equipadas con diversos tipos de motores eléctricos. Por su estudiado diseño constructivo solo tienen una pieza móvil, sin engranajes y sin contacto metal-metal, características que disminuyen notablemente su desgaste y garantizan un servicio continuado. No necesitan lubricación. Son versátiles y perfectamente adaptables, porque el cuerpo de la bomba puede girar 360º, lo que permite posicionar las bocas en función de la necesidad de instalación.
El cuerpo de la bomba es excéntrico respecto a la turbina, debido a la leva fija que lleva integrada. Debido a esta excentricidad el volumen que se crea entre las palas de las turbinas cam bia al girar ésta. Cuando las paletas pierden el contacto con la leva se origina una depresión que provoca la aspiración del fluido hacia el interior de la cámara. El fluido es transportado hacia la salida y las paletas vuelven a entrar en contacto con la leva, produciendo un incremento de presión que impulsa el líquido hacia el exterior. Las bombas son autocebantes.
El cebado es instantáneo ( 30 s). Pueden girar en cualquier ángulo y en ambos sentidos de rotación. Son bombas apropiadas para líquidos volátiles o viscosos. No se recomiendan para productos altamente abrasivos, debido al desgaste de las partes metálicas. Soluciones ligeramente abrasivas o arenosas pueden ser trasegadas con normalidad.